En 2024, España ha registrado un alarmante incremento en el número de accidentes laborales, según los últimos datos proporcionados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social. Esta tendencia resalta la necesidad urgente de implementar medidas efectivas que protejan a los trabajadores y garanticen entornos laborales seguros.
Desde enero hasta noviembre de 2024, se han contabilizado 502.152 accidentes laborales con baja, de los cuales 3.486 fueron graves y 599 resultaron mortales. Estas cifras representan un aumento con respecto al mismo periodo del año anterior, con dos accidentes graves y 64 mortales adicionales.
Los sectores más afectados incluyen la industria manufacturera, con 90.253 accidentes, seguida de la construcción, con 76.271; el comercio, con 66.556; las actividades administrativas y servicios auxiliares, que reportaron 52.038; y la hostelería, con 50.184 accidentes.
Entre las principales causas de los accidentes mortales se destacan los infartos y derrames cerebrales, así como los atrapamientos, aplastamientos y caídas desde altura. Los accidentes de tráfico también se identifican como un factor significativo en la siniestralidad laboral.
El desglose por género revela que el 71% de los accidentes en jornada con baja afectaron a hombres, mientras que el 29% correspondió a mujeres. En el caso de los accidentes mortales, 563 hombres y 36 mujeres fueron las víctimas.
La falta de formación en prevención de riesgos laborales y el incumplimiento de las medidas de seguridad se manifiestan como elementos determinantes en la alta siniestralidad. La promoción de una cultura de seguridad es esencial para proporcionar a los trabajadores las herramientas necesarias para identificar y prevenir riesgos.
Para aquellos trabajadores que han sufrido un accidente laboral y buscan información sobre sus derechos y procedimientos para reclamar indemnizaciones, existen recursos en línea que ofrecen asesoramiento gratuito y personalizado. Plataformas como «Indemnización por accidente laboral» brindan guías y apoyo para facilitar estos trámites.
Antonio González, investigador y reconstructor de accidentes, sostiene que una correcta prevención de riesgos en el entorno laboral es fundamental para reducir la siniestralidad. Esto implica realizar evaluaciones de riesgos específicas para cada puesto, establecer medidas de seguridad adecuadas y asegurar una formación constante sobre los procedimientos correctos a seguir. Además, mantener los equipos en condiciones óptimas y fomentar una cultura de seguridad entre empleados son cruciales para prevenir accidentes.
Las cifras de 2024 son una clara llamada de atención para reforzar las políticas de prevención y protección en el ámbito laboral. Es responsabilidad de todos, desde las instituciones hasta los propios trabajadores, contribuir a crear entornos de trabajo seguros y saludables.