Los primeros meses del año suelen ser un periodo difícil para muchas familias, marcada por los ajustes financieros posteriores a las fiestas navideñas. Sin embargo, el inicio del 2023 presenta señales de alivio, gracias a un aumento en la renta disponible y un favorable desempeño del mercado laboral. Estas condiciones están contribuyendo a aliviar la presión económica sobre los hogares españoles, lo que se traduce en una mayor capacidad para cumplir con sus obligaciones financieras diarias, como el pago de facturas.
El Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum revela que únicamente el 10% de los españoles admitió haber incumplido con el pago de alguna factura en el último año, lo que representa una significativa disminución de 12 puntos porcentuales con respecto a la edición anterior del estudio. Esta cifra se posiciona por debajo de la media europea, que alcanza el 25%.
España se posiciona así como el país con la menor proporción de ciudadanos que no han podido abonar algún recibo en el último año, seguido de cerca por Portugal (13%) y Francia (17%). En contraste, Dinamarca encabeza la lista con un 37% de incumplimientos, seguido por Finlandia (35%) y Grecia, Austria y Noruega, todas con un 34%.
La fortaleza financiera observada en los hogares españoles también se manifiesta en la reducción de la necesidad de endeudarse para cubrir gastos esenciales. Según el mismo estudio, solo el 20% de los españoles ha tenido que pedir prestado dinero o ha llegado al límite de su tarjeta de crédito en los últimos seis meses para cumplir con sus obligaciones financieras. Este dato representa una ligera mejora en comparación con el 22% anterior y se sitúa muy por debajo de la media europea del 37%.
El contexto favorable permite a muchos hogares mantener estabilidad incluso ante imprevistos económicos. De acuerdo con el Informe Europeo de Pagos de Consumidores, el 79% de la población en España señala que podría hacer frente a un gasto inesperado de 200 euros sin necesidad de recurrir a un préstamo, lo que resalta una percepción de mayor solidez financiera. Este dato sitúa a España en la primera posición del ranking, por delante de la media europea del 61%, seguida de Italia (74%), Irlanda (73%) y Alemania (68%). En el extremo opuesto, países como Hungría (52%), Austria (50%) y Grecia (47%) presentan los niveles más bajos.
Estos resultados son reflejo de una mejora en los hábitos de pago y en la capacidad de las familias españolas para gestionar sus finanzas. Sin embargo, para mantener este progreso, es fundamental que las familias tomen decisiones financieras prudentes e informadas, sobre todo en esta época del año, donde los gastos acumulativos y las subidas de tarifas podrían volver a ejercer presión sobre los presupuestos familiares.