La seguridad alimentaria se ha vuelto una prioridad ineludible para el sector de la hostelería y la alimentación en toda Europa ante la preocupante estadística de aproximadamente 40,000 casos de intoxicaciones alimentarias al año. De estos, 3,300 llegan a requerir hospitalización, más de 400 derivan en invalidez y, tristemente, unas 20 personas fallecen.
El 67% de estos incidentes son causados por alimentos contaminados con gérmenes patógenos, mientras que alrededor del 21% se deben a fallos en la distribución o almacenamiento. Este escenario no solo suscita titulares en los medios de comunicación, sino que también desencadena una crisis de confianza entre los consumidores, lo que muchas veces se traduce en demandas legales y un impacto devastador para la reputación de los negocios de restauración involucrados.
En casos extremos, la ley establece sanciones que pueden incluir penas de prisión para aquellos responsables por negligencia o delitos contra la salud pública. Más allá de las consecuencias legales, el daño reputacional emerge como una de las principales secuelas, amplificado rápidamente por las redes sociales y medios de comunicación que deterioran la percepción del consumidor y generan una drástica caída de las ventas.
Para mitigar estos riesgos, es primordial que las empresas del sector implementen medidas preventivas efectivas, centrando sus esfuerzos en la formación adecuada de sus empleados. La normativa europea, mediante el Reglamento (CE) 852/2004 y el Reglamento de la UE 2021/382, exige cursar programas específicos en seguridad alimentaria que ayuden a reforzar los protocolos de seguridad en los establecimientos.
EUCA Prevención de Riesgos Laborales ofrece cursos que son clave en este ámbito, centrados en la manipulación de alimentos, el análisis de peligros y puntos críticos de control (APPCC), y los protocolos IFS y BRC en seguridad alimentaria, dirigidos especialmente a empresas que exportan sus productos. Estos cursos capacitan a los empleados en las mejores prácticas para evitar la contaminación cruzada y el desarrollo de bacterias en los alimentos, asegurando así un enfoque preventivo integral a lo largo de toda la cadena productiva.
La empresa, con sede en Madrid, se compromete a ayudar a las organizaciones del sector a cumplir con la normativa vigente, evitando sanciones y protegiendo su reputación a través de una formación adecuada y continua, ofreciendo una solución preventiva que asegura el bienestar de sus clientes y la sostenibilidad de sus negocios.