La reciente edición de la revista ‘Tramos’, publicada por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible (MTMS), ha dedicado un monográfico especial a la metodología BIM (Building Information Modeling), destacando su avance en la contratación pública en España. La publicación detalla cómo esta herramienta de trabajo colaborativo está transformando los procesos en la Administración General del Estado (AGE), con un enfoque hacia edificaciones y movilidad más innovadoras y sostenibles.
La difusión de este monográfico ha sido impulsada por la Comisión Interministerial BIM (CIBIM), que busca integrar esta metodología en los contratos públicos. El objetivo es presentar a la Comisión Europea y demás Estados Miembros el valor estratégico del BIM dentro de la agenda política y económica del Gobierno de España para la digitalización y sostenibilidad. Un ejemplo concreto de este compromiso es el Plan BIM para la contratación pública en la AGE, que se implementó en abril, orientado a aumentar la eficiencia del gasto público y acelerar la digitalización del sector de la construcción.
El Plan BIM ha sido bien recibido en foros europeos, generando interés entre los Estados Miembros que implementan políticas de digitalización similares. En particular, la Dirección General de Mercado Interior, Industria, Emprendimiento y PYME de la Comisión Europea ha destacado el esfuerzo del gobierno español, considerando que se alinea con la Estrategia Industrial de la UE y el documento Transition Pathway for Construction, ambos enfatizan una transición verde y digital rápida en la construcción.
Una de las metas claves del Plan BIM es facilitar la participación de pequeñas y medianas empresas (pymes) en la contratación pública sin que la tecnología se convierta en una barrera. Por esto, la adopción del BIM será gradual y flexible, priorizando el uso de estándares abiertos, como el formato IFC, que aseguran interoperabilidad entre plataformas y software.
El monográfico de ‘Tramos’ también destaca los avances significativos logrados por diversas entidades y organismos del MTMS y otros ministerios en el uso del BIM, como la Dirección General de Carreteras y Adif, entre otros. Estos logros buscan servir como referencia para implementar la metodología BIM en contratos públicos entre 2024 y 2030.
Esta iniciativa de España es reflejo de un movimiento global en el que países como Estados Unidos, Reino Unido y Canadá ya han integrado el BIM en proyectos públicos para mejorar su eficiencia. Estas naciones también aplican sistemas de contratación colaborativos, maximizando las ventajas del BIM mediante la distribución de riesgos y beneficios.
El artículo concluye con una reflexión sobre la importancia de seguir avanzando hacia una construcción más digital y verde, destacando cómo el uso del BIM no solo representa un avance técnico, sino también una herramienta estratégica para asegurar un futuro más sostenible a nivel global.