Schneider Electric, líder en la transformación digital de la gestión de la energía y la automatización, ha incrementado significativamente la capacidad de producción en su fábrica de centros de datos prefabricados en Sant Boi de Llobregat, Barcelona. Este centro, considerado una de las principales ubicaciones en Europa para el diseño y producción de la gama EcoStruxure, ha extendido su superficie de 7.000 m² a 12.000 m². La expansión responde al aumento de la demanda de soluciones de centros de datos modulares, impulsada por el crecimiento de necesidades tecnológicas como la inteligencia artificial (IA).
La fábrica ahora cuenta con 5.000 m² adicionales específicamente dedicados a la producción, adaptándose a los estrictos requisitos de rapidez y eficacia del mercado actual. De hecho, la demanda de IA, que se estima generará hasta 15,7 billones de dólares para la economía global en 2030, ha llevado a la planta de Sant Boi a ser el principal centro de producción de centros de datos modulares de Schneider Electric en Europa.
La inversión reciente ha duplicado las capacidades de producción de la planta, permitiendo mejorar la fabricación y el ensayo de centros de datos modulares «todo en uno» y componentes como sistemas trifásicos de alimentación ininterrumpida (SAIs) y disyuntores. Marc Garner, vicepresidente senior del departamento de Secure Power & Data Center Business en Europa, destacó la importancia de los centros modulares como una solución eficiente y sostenible para las necesidades actuales de alto rendimiento.
Además, Schneider Electric ha firmado un acuerdo de 3.000 millones de dólares con Compass Datacenters para integrar sus cadenas de suministro y fabricar soluciones modulares a gran escala. Este acuerdo, enfocado en responder a la creciente demanda de IA, permitirá a ambas empresas suministrar centros de datos escalables y modulares con un diseño simplificado, apto para despliegues rápidos en entornos diversos.
La planta de Sant Boi incluye un entorno de producción optimizado que facilita la creación de centros de datos estandarizados o personalizados, preparados para soportar grandes cargas de trabajo informático. Esta instalación estratégica no solo permite a Schneider Electric acelerar los tiempos de despliegue en el mercado europeo, sino también asegura que los clientes en Europa tengan acceso a soluciones rápidas, predictibles y de alta calidad.